VERNAZZA
Ubicación:
Vernazza es una localidad italiana situada al noroeste del país, que pertenece
a la provincia de La Spezia. Está bañada por el Mar de Liguria y aún hoy en día
se conserva como uno de los más característicos pueblos de pescadores de la
Riviera Italiana. Es uno de los cinco pueblos que integran la región de “Cinque Terre”, que comparten
características similares de configuración, colorido y posición respecto al mar.
En concreto Vernazza es el cuarto pueblo que integra dicha región partiendo
desde La Spezia hacia el sur. Esta localidad cuenta con una población alrededor
de los 1.200 habitantes, que durante los meses de verano se ve ampliada
considerablemente debido al turismo. El acceso a la localidad es posible a
través de coche, autobús, tren o barco.
Historia: El
origen de Vernazza se remonta a la época romana, aunque es en el siglo XI
cuando adquiere real importancia por el papel que jugó como defensa contra los
piratas que se acercaban hasta estas Costas en busca de poder saquear todo lo
que encontraran a su paso. Debido a este motivo, la monarquía decidió convertir
la ciudad en una fortaleza. A partir del año 1276 quedó bajo dominio de la
República de Génova. Ya en el siglo XVI, con intención de rechazar los ataques
turcos, fueron reforzadas las viejas fortificaciones y se construyeron nuevas
torres de defensa. Entre el siglo XVII y el siglo XIX la región tuvo una época
de declive, que pudo ser amortiguada gracias a la construcción de la línea
férrea que evitó el aislamiento de la región. Aun así, la migración persistió
hasta los años sesenta, momento a partir del cual el turismo pudo restablecer
la prosperidad de la región.
Descripción: Vernazza es uno de esos lugares con encanto que te atraen y enamoran incluso antes de llegar a su encuentro. Si uno se ha decantado por acercarse hasta esta bella localidad a través de la opción del barco que recorre la Costa, ya desde lo lejos este municipio tiene tal colorido que es capaz de atraparte. El pasear por sus calles resulta del todo reconfortante al disfrutar de sus coloridas casas y sus antiguas calles sin aceras. En nuestro paseo, como elemento destacado que resalta de todo el entorno, podemos encontrar la Iglesia Parroquial de Santa Margherita d’Antiochia, con su impresionante campanario de 40 m, y que domina de forma imperante tanto el puerto, como la playa o los edificios de su alrededor. Todo esto hace que la visita de Vernazza y del Parque Nacional de Cinque Terre nos brinde una excelente oportunidad para disfrutar de la belleza de la Riviera Italiana, con los cálidos colores que nos ofrecen sus encantadoras casas.
Curiosidades: El acceso a los vehículos no está permitido por el interior de la localidad, por lo que hace que el tránsito por el interior de ella sea aún más agradable y cómodo de disfrutar. Para ello, se encuentra habilitado un aparcamiento justo a la entrada de dicha población, que permite una absoluta y cercana accesibilidad al interior de la Villa. Al poseer una playa de dimensiones reducidas a los pies del casco antiguo, hace que sea una práctica muy habitual ver como los bañistas se lanzan al mar desde el mismo muelle en el que los turistas esperan las embarcaciones que recorren la Costa, provocando un paisaje muy peculiar donde se mimetizan y entrecruzan, unos al lado de otros, turistas con indumentaria diversa apropiada para la ocasión y bañistas, lógicamente, en ropa de baño. Los pueblos que integran la región de la “Cinque Terre” poseen el selecto título de Patrimonio de la Humanidad por la Unesco desde el año 1997. A este respecto cabe destacar que Italia es el país con más bienes inscritos como Patrimonio de la Humanidad.
Si deseas visitar este encantador destino y personalizar el viaje aprovechando todos los recursos y opciones disponibles, no dejes de visitar mi web para conocer más detalles en https://coach-viajes.webnode.es/
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Curiosidades: El acceso a los vehículos no está permitido por el interior de la localidad, por lo que hace que el tránsito por el interior de ella sea aún más agradable y cómodo de disfrutar. Para ello, se encuentra habilitado un aparcamiento justo a la entrada de dicha población, que permite una absoluta y cercana accesibilidad al interior de la Villa. Al poseer una playa de dimensiones reducidas a los pies del casco antiguo, hace que sea una práctica muy habitual ver como los bañistas se lanzan al mar desde el mismo muelle en el que los turistas esperan las embarcaciones que recorren la Costa, provocando un paisaje muy peculiar donde se mimetizan y entrecruzan, unos al lado de otros, turistas con indumentaria diversa apropiada para la ocasión y bañistas, lógicamente, en ropa de baño. Los pueblos que integran la región de la “Cinque Terre” poseen el selecto título de Patrimonio de la Humanidad por la Unesco desde el año 1997. A este respecto cabe destacar que Italia es el país con más bienes inscritos como Patrimonio de la Humanidad.
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